Incluso aunque sepa a ositos de gominolas y se inhale como un aerosol libre de humo, los cigarrillos electrónicos (e-cigarrillos) con mayores concentraciones de nicotina pueden aumentar la frecuencia con la que los y las adolescentes consumen estos productos o fuman cigarros tradicionales, según un estudio de la Escuela de Medicina Keck de la Universidad del Sur de California (USC, por sus siglas en inglés), en Estados Unidos.
Incluso aunque sepa a ositos de gominolas y se inhale como un aerosol libre de humo, los cigarrillos electrónicos (e-cigarrillos) con mayores concentraciones de nicotina pueden aumentar la frecuencia con la que los y las adolescentes consumen estos productos o fuman cigarros tradicionales, según un estudio de la Escuela de Medicina Keck de la Universidad del Sur de California (USC, por sus siglas en inglés), en Estados Unidos. Sus autores/as evaluaron la asociación entre la concentración de nicotina en los cigarrillos electrónicos y el futuro comportamiento de fumar y ‘vapear’ en las pesonas jóvenes.
«Sabemos que fumar es una de las cosas más peligrosas que puedes hacer para tu salud, especialmente si comienzas durante la adolescencia», señala Adam Leventhal, director del Laboratorio de Salud, Emoción y Adicciones en la Escuela de Medicina Keck de la USC. «Debido a que la nicotina tiene efectos adictivos y que elevan el estado de ánimo, las personas adolescentes que usan e-cigarrillos con concentraciones de nicotina más fuertes pueden estar menos dispuestas a dejar de ‘vapear’ y estar más inclinadas a usar otros productos de nicotina, como los cigarrillos convencionales», añade Leventhal.
El estudio, publicado este lunes en ‘JAMA Pediatrics’, encontró que el 43 por ciento de los estudiantes de secundaria que consumieron cigarrillos electrónicos con alto contenido de nicotina (18 miligramos por mililitro o más) al inicio del estudio fueron «personas fumadoras frecuentes» durante el seguimiento seis meses después, lo que significa que fumaron cigarros tradicionales al menos tres veces en el último mes. Solo el 10 por ciento de los que usaron cigarrillos electrónicos de baja potencia (1-5 mg/ml de nicotina) y el 6 por ciento de los que usaron cigarrillos electrónicos sin nicotina fueron personas fumadoras frecuentes durante el seguimiento.
En comparación con las personas adolescentes que tomaron cigarrillos electrónicos sin nicotina, aquellas que fumaron cigarrillos electrónicos con alto contenido de nicotina fumaron 14 veces más cigarrillos por día, lo que se traduce en varios cigarrillos por día en promedio. «Sabemos que los adolescentes que fuman cigarrillos electrónicos tienen muchas más probabilidades de convertirse en fumadoras convencionales –dice Leventhal–. Nuestro estudio sugiere que la nicotina en los cigarrillos electrónicos puede ser una razón clave por la cual las personas adolescentes que usan estos dispositivos pasan a fumar más frecuentemente».
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades estadounidenses, el consumo de tabaco es la principal causa de enfermedad, discapacidad y muerte prevenibles en Estados Unidos. Casi 40 millones de personas adultas en Estados Unidos fuman cigarrillos convencionales, y alrededor de 4,7 millones de estudiantes de secundaria y preparatoria consumen al menos un producto de tabaco, incluidos cigarrillos electrónicos. Cada día, más de 3.800 personas menores de 18 años fuman su primer cigarrillo.