Sabes muy poco de sexo y te da vergüenza preguntarle a tus colegas, y a tu padre y tu madre ni por asomo. Así que la solución más fácil parece que se encuentra en tu bolsillo. Coges el móvil y tecleas…. ¡bingo! Ahí lo tienes, centenares de escenas porno a tan solo un clic, no sabes ni por dónde empezar. Una hora después crees que ya estás preparado aunque quizá se te escapa algo ¿Qué hay de real en todo lo que acabas de ver? ¿El sexo es así? Pues si eres actor, parece que sí, pero si eres una persona corriente, no, así que por si acaso tienes dudas te dejamos algunas ideas que a lo mejor te ayudan a aclararte para que esa noche no la cagues, o que si la cagas, al menos sea entre risas y buen rollo. ¿Lo más importante? Hablar, comunicarse e informarse a través de otros recursos que de verdad sean útiles. ¡Aquí te echamos una mano!Estás nervioso. Parece que por fin va a pasar algo. De momento os habéis enrollado un par de veces, sobre todo besos y tocaros por encima de la ropa, pero todo apunta a que esta noche en la fiesta vais a ir más allá. No quieres estropearlo, pero te da miedo ser torpe o hacer algo mal, que se ría de ti o que piense que eres un novato. ¿Ella ya lo habrá hecho? ¿Qué les gusta a las chicas? ¿Dónde le tengo que tocar? ¿Cómo puedo saberlo?
Solo sí es sí
Este es el paso previo y quizá uno de los más importantes, saber lo que la otra persona quiere hacer y para eso solo hay una señal clara: preguntar y que la otra persona diga que sí. Y aquí solo sí es sí, no vale un gesto, ir vestida de ninguna forma, no vale un “por su cara yo creía”, “pensé en todo momento…”. El consentimiento es absolutamente necesario y también es importante acordarse de que en cualquier momento la otra persona puede querer parar y que tiene derecho a cambiar de opinión.Los preliminares importan
Vale, ya os habéis puesto de acuerdo y queréis seguir adelante. El porno nos enseña que las chicas se excitan de un momento a otro, llegan a casa y ya están listas para lo que sea, pero esto no es así, en absoluto. De hecho que te toquen el clítoris o los genitales, si no estás excitada previamente, no es agradable e incluso puede hacer daño, y si hay penetración, ya ni te cuento. Todo tiene su proceso y los preliminares son muy importantes, pero sobre todo pueden ser muy divertidos. Meterle mano a alguien, jugar y erotizarse. Hay que descubrir qué cosas son las que encienden el deseo de la otra persona y no pensar que la finalidad de todo es siempre la penetración porque….Hay vida más allá del pene
En el porno hay un protagonista indiscutible en las relaciones sexuales: el pene, pene que rara vez aparece con un condón porque, en esa ficción llamada porno, parece que las ITS o los embarazos no existen. Sin embargo todo gira en torno al pene y su placer. Nunca verás un gatillazo en el porno o un pene que no esté erecto. El porno también nos enseña que una “buena” relación sexual es meter y sacar, meter y sacar de forma intensa. Lo cual está bien a veces, pero no siempre. Hay otros ritmos y velocidades que, oye, dan mucho mucho gusto. Y por supuesto, en el porno, cuando el hombre eyacula, podemos dar por hecho que la relación sexual ha terminado, da igual en qué momento se haya quedado ella y si ha disfrutado o está disfrutando. Sin embargo, cuando el pene sale de la ecuación todo es mucho más fácil y podemos pensar en muchas más posibilidades para pasárnoslo bien. Esto nos lleva a nuestro siguiente punto.La súper erección
Esta importancia que se le da al pene tiene graves consecuencias en las relaciones sexuales reales, fuera de la pantalla, y no solo para la chica. También el chico lo sufre, ya que la exigencia de tener una súper erección y la exigencia de controlar la eyaculación genera presión e incluso estrés. Ojalá las películas mostraran el sexo cotidiano: a todo el mundo se le baja de vez en cuando y no siempre se puede controlar bien cuándo se eyacula ¿Eso supone un problema para el placer? En la vida real, no. Porque en la vida real existen muchas partes del cuerpo que dan placer, como los dedos o la lengua. Así que un consejo: ante un gatillazo, pasa de tu pene y disfruta con caricias, lametones, cosquillas…Entre dar y recibir…el placer de compartir
El placer femenino, el cuidado o el respeto, es algo que rara vez verás en este tipo de pelis. Sí podrás aprender, sin embargo, un montón de actitudes violentas porque el porno no está hecho para reflejar lo que les gusta a las chicas, ni pensado para que ellas disfruten. ¿O acaso crees que puede ser placentero que te agarren con violencia para practicar una felación, que te provoquen arcadas o mantener posturas de contorsionista? Sin embargo, ver que la otra persona disfruta, tomarnos nuestro tiempo encontrando sus recovecos y zonas erógenas, puede ser una de las cosas más satisfactorias del sexo. Si nos quitamos presiones, si pensamos que no hay nadie evaluándonos, ninguna cámara grabándonos, quizá descubramos que podemos tener una relación sexual más disfrutona.La vida misma
La artista norteamericana Hazel Mead en una ilustración llamada “Cosas que no verás en el porno” lo explica muy bien: la timidez, las marcas que deja la ropa interior, cabezas que se chocan, intentos fallidos de ponerse el preservativo, él tomándose su tiempo para darle placer a ella, amor, cariño y afecto… son cosas que el porno evita y que sin embargo forman parte de nuestro día a día, al igual que los cuerpos diversos: ¿que no tienes el pene enorme? ¿que tienes michelines? ¿que la chica no tiene un pecho redondo y gigante? ¿que tienes mucho vello púbico? Pues ¡enhorabuena! eres una persona de carne y hueso. Y lo bueno es eso, que el sexo es para disfrutar de la carne y los huesos. Si pasas de la ciencia ficción o crees que necesitas ver algo que te ayude en la vida real, aquí te dejamos unas cuantas youtubers que pueden echarte una mano. Platanomelón La Psicowoman Sexperimentando
El sexo mandamiento una serie de podcast que abordan desde distintas aristas y visiones temas de sexualidad.
Escrito y publicado por IZASKUN AROCA y MARTA MONASTERIO de la Asociación Pandora Mirabilia (Género y Comunicación) el 22 de mayo 2019 para el proyecto Por Puro Placer
Fuente original: Por Puro Placer